José Mª Marco

De California a Andalucía

Hubo un tiempo, hace más de 20 años, en que Andalucía iba a convertirse en la California europea. La verdad es que lo tenía y lo tiene todo: una posición estratégica, un clima sublime, variedad de tierras y paisajes. El paraíso en la tierra. La realidad ha sido muy distinta. Salvando algunas zonas como Almería, Málaga, la Costa del Sol y Algeciras, Andalucía sigue siendo una de las regiones más atrasadas de España. El paro alcanza al 25,4 por ciento de la población. Se parece en algo a California, pero sólo en que el Estado norteamericano está en quiebra, como casi lo está ya, según ha dicho Griñán, su presidente, la Junta de Andalucía. Pero por mucho que Andalucía, en su conjunto, no haya pasado a la vanguardia, sí que se ha convertido en un modelo para el socialismo español. En Andalucía la crisis económica es endémica y se admiten tasas de paro inconcebibles en otros sitios. El Gobierno de la comunidad aguanta gracias a la demagogia y al reparto de dinero público que crea bolsas de dependencia en nombre de los derechos sociales. Para esto, asegura Griñán, se sacará el dinero de debajo de las piedras. Nadie lo duda. Es a lo que vamos en toda España: un paro estructural de alrededor del 17 por ciento, compensado con ayudas gubernamentales financiadas con deuda o subidas de impuestos que nos impedirán salir a flote. A menos que el Partido Popular rompa la racha, es la situación que nos espera en los próximos seis años. Contando desde la crisis, ocho o diez años de estancamiento, con efectos irreversibles en la vida de los españoles, en particular los jóvenes. Eso sí, la Junta se va a gastar el dinero que no tiene en una empresa destinada a pulverizar los tópicos que al parecer pesan sobre la región. Acabarán echando a los turistas. Pero ya hemos adelantado a California: allí todavía no han hecho nada parecido.