Federico Jimenez Losantos

Otro 'tijeretazo' es posible
Zapatero liquida la 'doctrina ZP'

Algunos ven con muy malos ojos lo que llaman «el protectorado» europeo y norteamericano sobre España. Pero bendito sea el protectorado si nos libra de los caníbales políticos, sindicales, patronales y sectoriales que esquilman a la nación. Es verdad que Rodríguez Zapatero carece de autoridad moral para dar un giro de 180 grados (360 para las víctimas de la LOGSE) a su «política social». Cinco millones de parados explican lo muy «social» de esa política.

Hay quien dice que la elección de los sectores afectados por el recorte del gasto -pensionistas, dependientes, funcionarios- no busca la crueldad sino convencer a la inversión extranjera de que el cambio va en serio. Pero lo cierto es que quitando el 80% de los fondos de ayuda al desarrollo (en realidad a las ONG y los regímenes del gusto del Gobierno) se ahorraría más que con todos los recortes. Y si se quitara la subvención a partidos políticos, patronal, sindicatos y sectores paniaguados se ahorrarían hasta 23.000 millones de euros.

Lo mejor de la enmienda de Zapatero a Zapatero es que permite ver lo que podría ahorrarse sin perjudicar a los más necesitados.


Se apagó el 'juez estrella'
Garzón, suspendido y al banquillo

Todas las trapacerías de última hora esgrimidas por Baltasar Garzón y sus garzones de corps para evitar su suspensión como juez de la Audiencia Nacional han fracasado. El CGPJ, cuyos miembros de obediencia socialista querían salvar como fuera al astro-juez, afrontaba la literalidad de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que no deja resquicio a la duda o la interpretación creativa.

Tras señalar fecha para el juicio oral del primero de los casos de prevaricación en que se halla imputado, que es el de atribuirse competencia para investigar nada menos que los «crímenes del franquismo», el juez Varela no ha dejado más alternativa a los representantes del Consejo General del Poder Judicial que cumplir con su deber.

Dado que el propio Garzón rechazó el encausamiento de Santiago Carrillo por la masacre de Paracuellos, fundando ese rechazo en la vigencia de la Ley de Amnistía en la Transición, sólo prevaricando podría sacarse de la manga esa especie de jurisdicción universal a mayor gloria particular.

Su última pirueta, huir al Tribunal Penal Internacional como asesor, también fracasó. El banquillo espera.


El 'president' se sube al Senado
6.500 euros para traducir a Montilla a algo

En línea con los recortes anunciados, aunque no ejecutados, por Zapatero ante la gravísima crisis económica, José Montilla aportará su granito de arena en el Senado, que se congregará el 24 de mayo para escucharlo a través de siete traductores que harán inteligible, acaso por primera vez, su discurso.

Las archiconocidas dificultades de Montilla con la lengua española no son superiores a las que padece cuando emplea el catalán, pero si hay que humillar a los españoles en general y a los castellanohablantes en particular, nada como poner a este demóstenes a impartir doctrina con traducción automática.

Si hasta para firmar en un libro de honor necesitó una chuleta, es imposible prever qué fantasías sonoras y psicofonías sorprendentes utilizará para cautivar a los senadores y no abrumar a sus traductores. Su frase más conocida -«..eeeehhh…»- está siendo estudiada a fondo por los profesionales de la llamada Cámara Frigorífica, para que ni siquiera los que habitualmente sólo hablan español, y bastante mejor que Montilla, se pierdan los matices de su florida oratoria en gallego, vasco y demás.


La gloria, medio siglo después
Atleti, Atleti, Euroatlético de Madrid

Entre los grandes y pequeños clubes de fútbol españoles, sólo el Atlético de Madrid ha llegado a una final: la segunda competición europea rebautizada Europa League, antes Copa de la UEFA y antes de antes Copa de Ferias, cuyo prolijo nombre oficial era Copa de Ciudades en Feria.

El Atlético tuvo en semifinales un enemigo temible, el Spanish Liverpool de Benítez, aunque sin el ex-atlético Fernando Torres. En el penúltimo minuto de la segunda parte de la prórroga, marcó el Atlético y eliminó al Liverpool. El otro finalista iba a ser el Hamburgo, que albergaba la final, pero el Fulham lo eliminó. En la final, fiel a su estilo agonístico, el Atleti decidió aún más tarde: a un minuto de los penaltis. No jugó como contra el Liverpool, pero tampoco el Fulham tiene el mismo nivel. Asentado en De Gea, Domínguez, Agüero y Forlán, el equipo de Quique Sánchez Flores marcó primero, se dejó empatar y se eclipsó. Agotados todos, se impuso la calidad y decidió el u-ru-gua-yo. Casi medio siglo después, el Atlético conquista su segundo título europeo. Lo celebró en Neptuno, si ha terminado de hacerlo.